Entendiendo la adicción a las redes sociales

Las redes sociales son las herramientas más usadas en un teléfono móvil por la mayoría de las personas. Aparte de para llamar y usar el WhatsApp, lo que más se usa, con diferencia, es Instagram. Facebook, TikTok, entre otros.

Cuando una persona tiene adicción a las redes sociales, esa persona no tiene control de ellas, sino que llega a ser un esclavo de su uso. Cambios de humor cuando no puede acceder o cuando no sale las cosas como esa persona quería, entrar constantemente incluso por inercia, pasar demasiado tiempo visitándolas e incluso descuidar su vida personal, relaciones sociales, ámbito académico y/o laboral, por estar usándolas de modo excesivo. Estos son algunos síntomas y signos que tenemos que identificar para ver si esa persona tiene una adicción, aunque este diagnóstico siempre tendrá que ser evaluado por un profesional, no vale con una entrada en una pagina web o un video de YouTube, claro está.

Consecuencias del uso excesivo de redes sociales

El uso excesivo de las redes sociales puede acarrear consecuencias para nuestra salud mental y física, como puede ser la ansiedad, depresión, trastornos del sueño y cambios en el estado de ánimo.

Cuando una persona está adicta, en ocasiones, le cuesta darse cuenta de su realidad distorsionada, se niegan a ver que hay un problema que está afectándole a él, y puede que sus seres queridos más cercanos que también están preocupados por esta situación.

El uso excesivo de redes sociales también pasa factura en el trabajo o en los estudios, ya que el rendimiento tiende a bajar notablemente. Por otro lado, también encontramos como la persona se aísla, deja de hacer cosas que antes hacía, deja de relacionarse con los demás. Y cuenta con cambios de humor si algo sucede en el ámbito de las redes sociales, ya sea no conectarse o no encontrar lo que busca.

Establecimiento de límites en el uso de redes sociales

Aquí estamos en la piedra angular, la joya de la corona, la clave del tratamiento psicología. En consulta enseñaremos a la persona adicta a que ponga limites, que aplique técnicas de autocontrol, dicho sea de paso, la persona tiene que estar implicada y querer cambiar, ya que, si no estaremos haciendo nada, ya que la persona no querrá ser ayudada.

El tema de los límites es tan importante, ya que una persona adicta no tiene control, ni ha puesto límites y ahora toca ponerlos. Por mucha ansiedad o ‘’mono’’, como se dice coloquialmente, que pueda pasar. Es normal, está adicto y tiene que controlar eso que nunca ha controlado, esto lleva un proceso. Por eso, será fundamental acudir a terapia para que nos enseñe de manera personalizada a poner un límite, a controlarnos, a que seamos nosotros dueños de nuestra vida y que nuestra vida no la marque una aplicación del teléfono móvil.

Fomento de actividades alternativas

Que importante es enseñarle a la persona adicta a las redes sociales, adicta al teléfono móvil, que hay vida más allá, ya que a la persona adicta le cuesta verlo en ocasiones.

Desarrollar actividades alternativas al uso del teléfono móvil, como quedar con seres queridos, meditar, hacer deporte, viajar, realizar actividades manuales como como pintar o dibujar, leer o incluso hacer algún voluntariado, entregándonos a los demás.

Será importantísimo que la persona adicta desarrolle este tipo de habilidades y actividades, ya que cuando alguien sufre una adicción tiende a encerrarse en su mundo, y el mundo real es tan grande que siempre habrá algo que descubrir, aunque ahora estemos con una venda en los ojos.

Educación sobre los peligros del uso inadecuado

Muchas veces, cuando hablamos de adicción, pensamos únicamente en el uso excesivo de las redes sociales, todo el tiempo que se pierde. Pero también no debemos olvidar que hay más peligros por un uso inadecuado.

Como puede ser la falta de privacidad, de seguridad y la influencia que puede tener nuestra vida, pensamiento y acciones los contenidos consumidos. Ocurre que muchas veces en las redes sociales, la persona únicamente ve lo que quiere ver, se crea una burbuja donde esa persona solo accede a contenido que le interesa y esto puede hacer que nos obsesionemos con según que cosas.

Uso consciente y crítico de las redes sociales

Entiendo que en internet se busca mucha información, pero contrastemos bien las fuentes de ese contenido que consumimos. Si queremos buscar cosas acerca de una enfermedad, acudamos a organismos oficiales y profesionales médicos contrastados, no nos basemos en las opiniones de particulares acerca de temas tan importantes, por citarte un ejemplo.

Por eso, es fundamental contar con un uso consciente y crítico de las redes sociales, evaluemos la autenticidad de esos contenidos y sepamos que muchas veces, lo que consumimos son opiniones vertidas por personas populares, más que de profesionales o expertos contrastados en la materia.

Apoyo profesional y terapia

Acudamos a terapia cuando veamos que solos no podemos controlar esto, no tengamos complejo en pedir ayuda, para eso estamos los psicólogos. La adicción a las redes sociales se puede aprender a controlar y manejar con la ayuda de la terapia cognitivo-conductual, la terapia psicológica con más aval científico.

Es importante tener un apoyo cuando la persona sufre una adicción, ya que es complicado deshacerse de ella solo, por eso la terapia y la ayuda de los psicólogos puede ser fundamental para dejar de sufrir.

Desarrollo de habilidades sociales sin tecnología

Piensa que hace 20 años no había redes sociales y la gente era feliz y socializaban cara a cara y no había ningún problema. Solo que ahora nos hemos acostumbrado a la comodidad de las pantallas de los móviles, pero estar tan cómodos y apalancados con el teléfono móvil a veces hace que dejemos de lado las habilidades sociales.

Por eso, tratemos de tener mas interacciones cara a cara, hagamos planes sin tecnología, dar un paseo, hacer deporte, pintar, leer, descubrir nuevos paisajes, hay actividades infinitas para reconectar con uno mismo y con nuestros seremos queridos.

Monitoreo y autoevaluación

Si una persona padece adicción a las redes sociales, adicción al teléfono móvil, será importante para su tratamiento monitorear y evaluar el propio uso de redes sociales. Aquí nos puede ayudar, descargarnos aplicaciones que nos informen de cuanto tiempo pasamos en redes sociales y que nos avisen cuando sobrepasemos el límite que nos hayamos marcado.

Para un tratamiento efectivo también será importante la autoevaluación, es decir, mantener un registro de la actividad. Realizar estas acciones nos ayudará a tomarnos en serio el tratamiento y poco a poco ir adquiriendo seguridad para controlar este problema.

Celebrar el proceso y la moderación

Luchar contra una adicción no es fácil, por eso, cuando la persona adicta a las redes sociales comienza a hacer avances y muestre una actitud abierta al cambio, tenemos que celebrar esos pequeños logros y motivarle a que siga en la senda de la mejora y el desarrollo personal.

Esto es una carrera de fondo, estos son hábitos que tenemos muy dentro nuestra y tenemos que cambiar, por eso precisamos de tiempo, pero también de constancia y compromiso por parte del paciente, para lograr adquirir hábitos saludables a largo plazo. Las redes sociales seguirán estando ahí, pero lo importante es que nosotros tengamos control sobre ellas, no ellas sobre nosotros.